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Las reuniones de acompañamiento espiritual suelen llevarse a cabo una vez al mes por una hora. Las conversaciones pueden girar en torno a las relaciones, las circunstancias del trabajo, la salud, la oración o el discernimiento de la vocación. Puede haber un diálogo sobre gozos o tristezas, posibilidades emocionantes o frustraciones; procuramos notar la presencia de Dios, su obra y sus invitaciones en medio de todas nuestras experiencias. El acompañamiento espiritual también se puede ofrecer a grupos de 4 a 6 personas, y esta experiencia se conoce como acompañamiento espiritual grupal. Este ejercicio de escuchar atentamente rinde un fruto hermoso entre amigos y grupos pequeños.
¿Es Confidencial Lo Que Se Habla En La Sesión De Dirección Espiritual?
La confidencialidad es esencial en la dirección espiritual, la cual requiere un nivel alto de confianza debido a los asuntos delicados y sensibles que se tratan.
Como Directora Espiritual, yo me reúno con una supervisora para examinar lo que ocurre en mi corazón, mente y alma al ofrecer dirección espiritual. En esa supervisión se mantiene la confidencialidad.
Mantendré la confidencialidad excepto cuando la ley requiera que yo reporte cierta información provista por el cliente o por fuentes colaterales. Leyes de protección de la niñez y del orden público exigen que yo informe las siguientes situaciones a las autoridades pertinentes:
- Sospecha de abuso o negligencia, en el pasado o en el presente, hacia niños, adultos y ancianos.
- Si hay razón para sospechar que la persona está en serio peligro de hacerse daño a sí mismo o ha amenazado hacerle daño a otra persona.
Meg Howard 